Geología estructural
Geología estructural: conozca los fundamentos. La geología estructural es la rama de la geología que estudia la geometría, distribución y formación de las estructuras geológicas.
Destacados
- Las principales estructuras geológicas se crean durante la formación de las rocas
- Estudiar la geología estructural significa identificar, medir y explicar la información a un no profesional.
- Existen varios métodos para la geología estructural.
¿Qué es la geología estructural?
El término estructuras geológicas se refiere a la configuración geométrica de las rocas. Esto incluye el estudio de esta configuración cuando las rocas han sufrido alguna deformación, y esto implica que hay dos tipos de estructuras geológicas: primarias y secundarias.
Estructuras geológicas primarias
Las estructuras geológicas primarias son las que se crean durante la formación de las rocas. Entre ellas se encuentran la estratificación, la foliación diagenética, el bandeado de flujo, la estructura eutaxítica, etc.
- Estratificación
- Foliación diagenética
- Banda de flujo
- Estructura eutaxitica
Estructuras geológicas secundarias
Las estructuras geológicas secundarias se crean durante un proceso de deformación que sufre la roca después de haberse formado.
Como ejemplo de estructuras geológicas secundarias, se pueden nombrar: la foliación metamórfica, los pliegues, el clivaje asociado al plegamiento, las juntas y las fallas, como principales.
- Pliegues
- Escote
- Articulaciones
- Fallos
Ya hemos dicho que la geología estructural se encarga de estudiar la geometría, la distribución y la formación de las estructuras geológicas. Por ello, vamos a analizar cada uno de estos aspectos.
Estudiar la geometría de las estructuras geológicas implica identificar su forma
Estudiar una estructura geométricamente implica identificar, medir y describir su geometría de forma sencilla. Esto se hace para que tanto la persona que toma los datos como la que los lee puedan imaginar prácticamente lo mismo.
Esta información servirá posteriormente para elaborar los modelos geológicos y el respectivo informe que acompaña a los modelos.
Estudiar la distribución de las estructuras geológicas significa comprender cómo se ubica espacialmente la geometría de estas estructuras dentro del contexto geológico en el que se encuentran.
Para ello, el geólogo sobre el terreno utiliza herramientas como el mapa topográfico y/o el GPS para conocer la ubicación del lugar. A continuación, se utiliza un martillo geológico y una lupa para identificar las rocas aflorantes. Además, se necesita una brújula para orientarse y para orientar las estructuras geológicas y se utilizan herramientas como la cinta métrica para conocer las dimensiones del afloramiento, las unidades geológicas y las estructuras geológicas.
Posteriormente, el geólogo plasmará la información recogida en su informe de campo. Sin embargo, lo hará principalmente en un mapa llamado geológico (si muestra toda la información geológica: unidades litológicas, estructuras geológicas, datos estructurales, etc.) o en un mapa estructural (cuando hace hincapié en las estructuras geológicas).
A continuación, basándose en este mapa y, en función de la información recopilada, el geólogo ampliará su análisis elaborando perfiles geológicos o estructurales para comprender en profundidad la geometría de las unidades geológicas y las estructuras.
Estudiar la formación de las estructuras geológicas implica comprender desde la teoría, en principio, los mecanismos y procesos geológicos que pueden generar una determinada estructura geológica.
El principio fundamental para iniciar cualquier trabajo es conocer bien los fundamentos teóricos. Si puede identificar las estructuras primarias, sabrá si una estructura observada es secundaria o no.
Métodos básicos de la geología estructural
El trabajo en geología estructural, al igual que en cualquier rama del conocimiento, requiere una metodología que permita obtener los resultados deseados. En este punto, se mencionarán cuatro de los pasos más críticos de la metodología de trabajo en geología estructural.
Entender cómo se deforman las rocas
El principio fundamental para iniciar cualquier trabajo es conocer y comprender los fundamentos teóricos. Si puede identificar las estructuras primarias, sabrá si una estructura observada es secundaria o no. Asimismo, suponiendo que se identifique el tipo de estructura secundaria encontrada, se puede analizar su geometría, configuración geométrica, distribución espacial, proceso de formación y, adicionalmente, se pueden buscar otras estructuras geológicas que posiblemente estén asociadas a la estructura observada.
Describir y recoger medidas de la geometría actual de las rocas
Una vez identificadas las estructuras primarias y secundarias, hay que hacer una descripción detallada de cada una de ellas. Esta descripción debe incluir el tipo (o los tipos) de roca presente, el tipo de estructura, el tipo de deformación observada en las estructuras secundarias (continua, discontinua, homogénea, heterogénea). También, la respuesta de las rocas a los esfuerzos (comportamiento frágil, dúctil o frágil-dúctil), el área ocupada por la deformación. Por último, la descripción geométrica de cada estructura, incluyendo los datos estructurales tomados con la brújula.
Interpretar la configuración y distribución de las estructuras geológicas
La información recogida en el paso anterior debe plasmarse en un mapa geológico para comprender la configuración geométrica y la distribución espacial de las estructuras geológicas. A continuación, esta distribución debe analizarse dentro del contexto geológico local y/o regional y, preferentemente, deben realizarse perfiles geológicos (o modelos tridimensionales) para inferir y comprender la distribución de las estructuras en profundidad.
Comprender la historia de la deformación de las rocas observadas
Basándose en los procesos anteriores, es posible llegar a una (o varias) hipótesis sobre la historia de la deformación de las rocas observadas, incluyendo factores cinemáticos, factores dinámicos, el tiempo y la evolución de la deformación.